El próximo 22 de diciembre se cumplen dos años del segundo mandato de Miguel Arias Cañete al frente de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. En otro artículo de esta misma sección ya comentamos que su regreso a Atocha fue más el deseo de su jefe, Mariano Rajoy, que de él mismo, y aunque hay un dicho popular que asegura que «segundas partes, nunca fueron buenas», puede que el actual titular del agro español consiga salir fortalecido de esta nueva etapa.
¿Por qué? Pues porque haciendo un análisis de semejanzas y diferencias entre ambas fases, es ahora cuando Arias Cañete se encuentra en una mejor posición política.
1º-El ministro sigue siendo inteligente, rápido de mente, con una gran capacidad para retener muchos datos y para recitarlos a ritmo de kalasnikov, como si de una ametralladora se tratara, —tal y como hizo durante su primera comparecencia ante la Comisión de Agricultura del Congreso, donde presentó las 66 medidas de su programa de trabajo—.
2º-Otro rasgo de su personalidad que mantiene es su falta de modestia, lo que le ha llevado a asegurar que en menos de dos años de legislatura ya había cumplido casi la totalidad de dicho programa de trabajo. (?)
3º-La mano izquierda le sigue flojeando, ya que, al igual que en la anterior etapa, no consigue hacerse con los colectivos del sector, puesto que, según nos han comentado diferentes fuentes, se presenta en las mesas de trabajo más dispuesto a comunicar sus decisiones que a negociarlas abiertamente con los implicados.
4º-Una cuarta semejanza de ambos mandatos es que Cañete mantiene en su equipo a quien ya fuera su mano derecha: a Isabel García Tejerina, una mujer eminentemente práctica y discreta, que ha afrontado esta segunda etapa con una mayor experiencia y madurez que hace 13 años, cuando con menos de 35 tuvo que tragarse algún que otro sapo al saber que veteranos del sector la cuestionaban por su juventud.
5º-Entre las diferencias, una de las más destacadas es la mayor continencia verbal de Cañete. Aunque de vez en cuando se le sigue escapando alguna que otra frasecilla de esas que pueden llegar a hacer historia, es cierto que en este segundo mandato son menos que hace una década. Y es que en la memoria de algunos todavía rechinan palabras como las de que la tramitación parlamentaria del Plan Hidrológico Nacional iba a ser un «paseo militar» o aquellas otras en la que aseguraba que «el regadío hay que utilizarlo como a las mujeres, con mucho cuidado, que le pueden perder a uno».
6º-Y hablando de mujeres, García Tejerina también ha experimentado algún que otro cambio, dejando un poco de lado su perfil puramente técnico y apostando por una vertiente más política que le lleva a aprovechar cualquier oportunidad para incluir la cuña propagandística de lo bien que el PP y su presidente lo están haciendo. ¿Con esto querrá hacerse un hueco en el panorama político español? Eso es lo que opinan muchos, que la postulan como la próxima ministra de Agricultura, si es que los rumores de la marcha de Cañete de Atocha son ciertos.
7º-Y es que otra diferencia es que mientras en el Gobierno de Aznar, Arias Cañete fue, más o menos, «un ministro más», en el de Rajoy se enmarca entre aquellos que forman parte de su círculo más cercano, con lo cual tiene más posibilidades de promocionar.
8º-Pero sin duda, lo más destacable del actual Cañete es que ahora está obteniendo un mayor reconocimiento social. Repite en las encuestas del CIS como el ministro mejor valorado y ha recibido el premio de El Nuevo Lunes con el que 96 medios de comunicación han reconocido la transparencia informativa de su Ministerio. Lo que sin duda, le coloca en una mejor posición de salida en la maltrecha pole política.
Haciendo balance de todo lo expuesto, la situación al ecuador de la Legislatura no está tan mal, ¿no? Sobre todo si se le compara con la de otros miembros del Gobierno —Matos, Gallardones, Werts,…— Veremos qué pasa a partir de 2014.
De momento, desde lacriba.net os deseamos a todos que lo empecéis con buen pie. (A usted también, señor ministro. ;))
¡Plumed me encanta leerte! ¡Qué buen traje!
Viniendo de ti, todo un honor. ¡¡Maestra!!