«Los líos los veo por mi correo», afirmó el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, a la Junta Directiva de la Asociación de Periodistas Agroalimentarios de España, APAE. De esa manera, el titular del agro español confesaba que su agenda y sus preocupaciones se rigen por lo que dicta lo que coloquialmente denominamos «mail».
Cañete, el ministro mejor valorado según el CIS y condecorado en 2013 con el galardón de mayor transparencia informativa (según El Nuevo Lunes) recibió —junto a su director de Comunicación, Jesús María Mellado— a la Junta Directiva de la Asociación de Periodistas Agroalimentarios de España, APAE. La presidenta del colectivo, Lourdes Zuriaga, estuvo acompañada por Jesús López Colmenarejo, Olatz Ruiz, Rubén Villanueva, Angel Rico, Elisa Plumed [de Lacriba.net] y el secretario ejecutivo de APAE, Álvaro Bárez, todos ellos comunicadores especializados en agricultura y alimentación.
Cañete se mostró muy receptivo con las propuestas de la Asociación y reconoció la importancia de saber informar del sector agroalimentario, algo sobre lo que, según bromeó no le preguntan tanto como a él le gustaría «sobre todo en las entrevistas de TV : que si de Montoro, que qué voy a hacer en el futuro… Y de lo mío, ¿qué?», espetó el ministro.
Como era lógico, el titular de Agricultura aprovechó el encuentro para explicar a los periodistas cuál es su agenda y sus objetivos para 2014 y lo que queda de 2013: «Esta semana la Cumbre del Clima en Varsovia, la siguiente la Cumbre de la OMC en Bali y ya estamos a principios de diciembre y en las Navidades», recitó de memoria.
Para el próximo año, señaló que los objetivos que se ha planteado son: aprobar una Ley de Calidad Alimentaria; impulsar el Plan de Innovación del sector agroalimentario a partir de unos nuevos fondos destinados por la Comisión Europea; celebrar elecciones al campo (tras aprobar en 2013 la Ley de representatividad agraria); poner en marcha la Agencia de Vigilancia de la Cadena Alimentaria; promover la nariz electrónica como sistema para reconocer la calidad de los aceites de oliva; impulsar la internacionalización de los productos españoles…
Sin embargo, en su opinión, el hueso más duro que le espera en 2014 es la distribución de las ayudas de la PAC para el PDR 2014-2020. «Eso es un sudoku, un rompecabezas tremebundo. Me voy a tomar las Navidades para pensar una propuesta de cómo hacerlo», apuntó. Según explicó el ministro, su postura es reequilibrar el mal reparto de los fondos que se hizo en el período 2000-2007, donde Andalucía fue la comunidad autónoma más beneficiada en detrimento de otras zonas. (Algo que la consejera andaluza, Elena Víboras, ya se huele porque desde que tomó posesión del cargo no para de repetir que del PDR no le quiten ni un euro).
Respecto a otras cuestiones relacionadas con la PAC, Cañete adelantó que 2014 será un ejercicio de transición complicado hacia la nueva reforma, y quiso dejar bien claro que, pese a la posibilidad que abre Bruselas de recibir pagos directos, ni los productores de frutas y hortalizas ni los de viticultura los tendrán. «No se pueden aumenta el número de perceptores», sentenció el ministro.
«Y no sé si me olvido algo más», dijo mirando su móvil. «Los líos los veo por mi correo», repitió.